martes, 23 de marzo de 2010

El bichito que le susurró la vida.


Es la historia de una niña que no estaba conforme con nada, todo le parecía mal, todo era negatividad en su vida, nada le parecía optimo y vivía en un mundo llamado frustración, su casita daba con un hermoso paisaje abundante de naturaleza y vida, ella se quejaba porque los insectos hacían mucho ruido y las flores debido a su polen le hacían estornudar cuatro veces al día y eso para ella era un suplicio.

Tenía unos cuantos de amigos, pero ella prefería estar sola y sentirse única, ya que era egoísta una egocéntrica y gran déspota.

Su madre le proporcionaba mimos y cariño, pero ella no los tomaba en cuenta y se construía una coraza inquebrantable que hería los sentimientos de la buena mujer.

No soportaba que la gente gritara, que la gente riera de cualquier simpleza, que la gente caminara feliz, no soportaba al ser humano en definitiva.

Una noche, en la cual la niña tenía muchísimo sueño, se dirigió a su cama, su confortable cama, de la cual se quejaba porque para ella le resultaba demasiado pequeña, y cayó en un profundo sueño, en la mitad de la noche, sintió una sutil y aguda voz muy cercana a su oído, resulto ser un pequeño grillo del campo, que había estado observando el comportamiento de la niña y comenzó a hablarle.

- Hola niñita, te estuve observando , veo que eres una niña muy triste y muy frustrada y sinceramente quiero ayudarte, quiero decirte que la vida es maravillosa, que tú has sido elegida para vivirla y disfrutarla , la vida es mágica y se puede vivir de muchas maneras ,pero tu manera de vivirla no es la más adecuada,¡ despierta!

Y la joven se despertó inmediatamente gritando, ‘’ ¿Qué es esto?’’, ‘’ ¿Quién me habla?’’ se llevo directamente el dedo a la oreja y sacó al pequeño grillo que le estaba hablando.

-¡Tú eres el culpable de todo, me has despertado de mi plácido sueño!

E inmediatamente aplastó al grillo con el dedo índice. Pero se quedó realmente pensativa, ya que parecía que le decía algo, pero ya era demasiado tarde, el pequeño grillo estaba muerto, pero eso sirvió de algo, sirvió para que la joven se sintiese arrepentida y que al día siguiente se dirigiese al campo a interesarse por el grillo los estornudos ya no le afectaban , ni tampoco el sonido de los insectos, solo quería encontrar a los pequeños grillos verdes, después de dar unas cuantas vueltas sin sentido , los logró encontrar, los grillos que conocían al difunto, le regañaron a la niña por haber matado al pobre grillito, que solo intentaba ayudarla y decirle que fuera una niña feliz.

De repente la niña se puso a llorar desconsoladamente y se sintió arrepentida durante toda su vida y con la curiosidad de que le habría dicho exactamente el grillo, ya que los demás grillos no quisieron hacerlo, para que se diera cuenta por ella misma.

Moraleja: hay que saber escuchar a todo ser, por muy insignificante que nos parezca al principio, quizás al escuchar, descubramos que es lo mejor que nos han dicho en nuestra vida.

Esta historieta tengo que decir que está inspirada en una cosa parecida que le ocurrió a Javi xDD un poco más realista y a demás que él para nada tiene que ver con esa niña( más bien yo ), aún así te dedico mi creación.


2 comentarios:

  1. ¿Lo has escrito tu Kitty? Está muy chulo en cualquier caso y lleva más razón que un santo!

    No sabia q tuvieras blog... me pasare d vez en cuando a cotillearte, mwhahahaha

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  2. Tienes razón, no hay nada insignificante, se puede aprender de todo. Newton abrió un nuevo paradigma científico simplemente porque le cayó una manzana en el cabestro, fiete tú que cosa. Asi que imagina lo que se puede aprender de otro ser, otra persona que piensa y siente como tú. Suena a perogrullada, pero en este mundo de individualismo cada vez más radical, cada uno solo se escucha a si mismo creyendose el rey del mambo.

    Y bueno no me enrollo que además mi próxima entrada trata sobre ese tema y no quiero spoilearos xD

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